La frase ¨alimentación saludable¨ la usamos constantemente para referirnos a cómo creemos que comemos o deberíamos comer para mantenernos sanos. Nadie duda que ¨comer sano¨ es esencial para evitar enfermedades o para mejorar nuestra condición actual. Pero ¿exactamente a qué nos referimos cuando hablamos de este tema?
Muchos amigos y pacientes dicen alimentarse bien y cuando les pregunto qué comen responden:
- ¨Yo laburo todo el día, pero como re sano, por ejemplo milanesas de soja, bandejitas de ensaladas, yogur descremado y empanadas de verduras.¨
- ¨Como todo descremado y light, eso esta re bien o no? Digo, así puedo bajar unos kilos.¨
- ¨Siempre elijo las galletitas de salvado, las de avena y compro pan negro.¨
- ¨Me hice vegana porque estoy en contra del sufrimiento animal, pero me da fiaca cocinar y no sé qué hacerme, asi que como pastas, arroz… ah! y mates con galletitas todo el día.¨
- ¨Yo me estoy cuidando, así que no como nada que tenga hidratos de carbono ni grasas, solo proteínas y verduras. Los hidratos son lo peor.¨
- ¨Dejé las harinas por dos semanas, no comí ni una galletita y me sentí re bien después. Pero bueno, ayer nos juntamos a estudiar y me bajé la bolsa de criollos, no pude contenerme.¨
Muchos comemos de manera parecida y no nos damos cuenta, simplemente porque durante el dia tenemos nuestra atención en tantas cosas que es difícil registrar los alimentos que nos llevamos a la boca ¿o no te paso de bajarte un paquete de galletitas sin darte cuenta?. Comemos como si fuese un trámite o bien seguimos tendencias generales sin tener en cuenta nuestras particularidades. Por eso, más allá de lo que nos gustaría, en la realidad ¿podemos decir que llevamos una alimentación saludable?
Recordemos que nuestras elecciones están atravesadas por varios factores: creencias, información de diversas fuentes, costumbres, mitos y la influencia publicitaria que determinan en gran medida lo que es saludable y lo que no.
Es muy importante que cada tanto revises tu alimentación, reflexiones sobre lo que elegis consumir y observes el impacto que tu dieta tiene en tu cuerpo, en tu rendimiento, en tu salud. Tenes la oportunidad de hacerlo cada vez que vas al super, a la dietética, a la verdulería, podes leer las etiquetas y preguntarte ¨¿este nombre raro puede ser comida?¨ y si te cuesta hacerlo, si no sabes por dónde comenzar, consulta con un especialista que se dedique a vos y te ayude a construir una alimentación saludable coherente con tus necesidades y tu estilo de vida.
Lic. Andrea Lizarraga
ph: Amber Locke