Las compotas son un clásico de la infancia cuando la abundancia de la naturaleza nos regalaba una enorme cantidad de duraznos, manzanas, pelones y peras y había que aprovecharlos con una receta sencilla. O bien era la preparación infaltable cuando alguien se enfermaba de la panza y lo único que podía tolerar era esta fruta cocida, dulce y de fácil digestión…
Acá va una receta renovada y deliciosa, que la disfruten!
- Manzana roja grande: 1
- Manzana verde grande: 1
- Ciruelas deshidratadas: 100 gr
- Peras o pelones deshidratados: 100 gr
- Agua: 1 1/2 lt
- Azúcar mascabo o estevia: a gusto
- Canela, clavo de olor, semillas de coriandro, jengibre: a gusto
En una olla profunda coloca el agua, las manzanas cortadas en gajos y las frutas deshidratas enteras. Endulza a gusto y agregale las especias que más te gusten: canela, clavo de olor, semillas de coriandro, pimienta negra en grano, cardamomo. Herví a fuego suave hasta que la fruta esté cocida y serví.
A tu compota podes sumarle: frutos secos (almendras, nueces, castañas picadas), semillas, mezclarla con yogur o avena cocida, y para transformarla en postre nada mejor que una buena cucharada de crema batida o helado de crema americana. La cocina es tuya, a jugar!!